5 dic 2015

PRETENSIONES/BERRETINES... ¡¡¡CONTRA NATURA!!!

PRETENSIONES/BERRETINES... ¡¡¡CONTRA NATURA!!!


Política sábado 05 de diciembre 2015

Una transición en contra de la historia


Por: Alberto Amato
 
Faltan 5 días para que termine la presidencia de Cristina Kirchner y comience la de Mauricio Macri y todavía no hay acuerdo:¿Dónde será la entrega del mando?. Historia de los traspasos, entre protocolos, política y caprichos
En su afán por reinventar la historia para acomodar el presente a su antojo, el kirchnerismo, con la Presidente a la cabeza, inventó una nueva ceremonia para transmitir el mando presidencial. 
 
La tradición, inaugurada hace casi un siglo por Hipólito Yrigoyen, dice en esencia que el presidente saliente no tiene nada que hacer en el Congreso Nacional, donde ese poder, el Legislativo, se encarga de recibir el juramento del nuevo presidente.

Es la Asamblea Legislativa y sus autoridades quienes se encargan de la ceremonia, del protocolo, de la pompa y la circunstancia allí, en el Congreso, donde no hay, nunca hubo hasta el kirchnerismo, ni bastón de mando ni banda presidencial. Esos atributos simbólicos del poder, están en la Casa Rosada, que es la sede del Poder Ejecutivo. Y es allí donde el flamante presidente que llega del Congreso, recibe esos atributos de manos de quien ya es ex.

Esa lógica ceremonial y simbólica, que Cristina Kirchner no quiere entender, la entendieron hasta los más brutales dictadores que padeció el país.

En 1983, Héctor J. Cámpora juró en el Congreso, dio su discurso y fue a la Rosada a recibir banda y bastón de manos del teniente general Alejandro Lanusse. Diez años después, Raúl Alfonsín fue al Congreso, juró, dio su discurso y fue a la Rosada a recibir banda y bastón de manos del general Reynaldo Bignone.

El 8 de julio de 1989, Carlos Menem se presentó ante el Congreso para jurar como nuevo presidente tras las elecciones del 14 de mayo. Más tarde, fue a la Casa de Gobierno donde lo esperaba Raúl Alfonsín para colocarle la banda presidencial y entregarle el bastón. Esos actos son rubricados por el Escribano General de Gobierno, quien da fe que ambos presidentes, el ex y el nuevo, prestaron conformidad para irse y para llegar. 
 
Un nuevo presidente que juró en el Congreso, no dejaría de serlo por no recibir los atributos simbólicos del poder de manos del ex. Y la Constitución indica que el nuevo jefe del Ejecutivo debe jurar en el Congreso. Nada dice de los atributos de mando, que es una ceremonia protocolar que no está regulada y que siempre se hizo en la Casa Rosada.

Fernando de la Rúa juró su cargo ante el Poder Legislativo y ya en la tarde de aquel 10 de diciembre de 1999, recibió banda y bastón de manos de Carlos Menem, que lo esperó en la Casa Rosada y tampoco apareció antes por el Congreso Nacional.

La división de poderes es clara: en el Congreso y ante la Asamblea y el Poder Legislativo en pleno, juran los nuevos mandatarios. No hay allí transmisión de mando, sino asunción formal. 
 
En la Casa de Gobierno, donde no hay jura alguna, el Poder Ejecutivo hace su propia ceremonia de traspaso del poder.

Esa tradición, que viola hoy el kirchnerismo, se alteró tras la crisis de 2001. Eduardo Duhalde, presidente provisional nombrado por la Asamblea Legislativa, fue al Congreso en 2003 a entregar banda y bastón a Néstor Kirchner porque allí, en el Congreso, había sido designado.

Fue a Néstor Kirchner a quien se le ocurrió entregar bastón y banda en el Congreso porque quien los recibía era su mujer, y en una misma ceremonia se mezclaron los dos poderes del Estado, como si fuesen uno solo. Un símbolo de lo que se avecinaba.

Lo ideal sería volver a la tradición. Que el jueves 10 y ante el Congreso, donde Cristina Kirchner no tiene nada que hacer, Mauricio Macri jure su cargo y luego, en la Casa de Gobierno, reciba bastón y banda de manos de la ya ex presidente.

Lo contrario, es ir contra la historia. De la Presidente ya no se puede esperar otra cosa. 
 
Pero su capricho no puede concretarse sin la complicidad de los legisladores y del resto de los funcionarios que, se supone, deberían velar por la legalidad y la normalidad y no permitir que ambas estén sometidas a amargos antojos y resentimientos.
 
fuente
"infobae", 05.12.2015

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¡BIENVENIDOS, GRACIAS POR ARRIMARSE!

Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio


Mendoza, 11 de noviembre de 2009.