LA SEÑORA FERNÁNDEZ
Y… LA EXACTITUD
Cristina pretendió justificarse por no haber defendido a nadie en épocas de la dictadura
Oct 18, 2017
09:30 – “Porque vivíamos en Santa Cruz y allí no había desaparecidos”, dijo Cristina Fernández al diario “El País” de España, suponiendo que la información iba a quedarse solo en la madre patria y nunca nos íbamos a enterar de la falsedad de tal afirmación.
Es que el periodista Carlos Cué, le había preguntado por qué ni ella ni su marido, Néstor Kirchner, habían presentado ningún Hábeas Corpus durante los años del proceso militar en esta provincia, un hecho que reiteradamente sale a la luz, ya que en ese momento los Kirchner estaban abocados al desarrollo de negocios inmobiliarios que hacían merced a la aplicación de la famosa ley 1050 y la pérdida de propiedades que sufrían los clientes del banco al que Néstor representaba como abogado.
Está mácula los ha perseguido a los Kirchner desde que se embanderaron con los derechos humanos a nivel nacional e hicieron de los “desaparecidos” una causa a través de la cual juzgaban con simulada autoridad, a todo aquel que no se identificara con el ala izquierda del peronismo, es decir el ala montonera, al que ellos siempre dijeron pertenecer pero no se conoce ninguna actividad militante concreta de uno u otro.
OPI recurrió a quien compartió aquellos años con Néstor y Cristina y él sí fue quien promovió e interpuso Habeas Corpus por compañeros desaparecidos; se trata de Rafael Flores, desde hace varios años viviendo en Buenos Aires, quien recordó que ni Néstor ni Cristina, promovieron alguna medida a favor de los desaparecidos en la provincia.
A raíz de ello, Flores consideró que con la frase dicha por la ex presidenta al diario español, CFK pretende justificar que en los años de la dictadura no hayan defendido a nadie ante la justicia, por la violación de los derechos humanos que en esos años incurría la dictadura (años 1976/1979).
El ex legislador consideró una “puesta en escena” el tratamiento que tanto Néstor como Cristina le dieron a los derechos humanos a nivel nacional y el “castigo y persecución” a quienes hubieran incurrido en violación a los DDHH y lo asoció con la necesidad de plantear un negocio alrededor de la causa que era justa y loable y terminaron bastardeando.
Con respecto a si hubo o no desaparecidos en esta provincia, Flores remarcó “Rossel y Toninetti, son tal vez los más conocidos por la gente a raíz de su actividad y militancia política, pero no desaparecieron en la provincia; pero otros si fueron desaparecidos allí.
Un gran amigo nuestro fue Héctor Irastorza (1977), un veterinario que hizo toda la carrera con mi esposa y él era de La Plata, estaba haciendo el servicio militar ya recibido, en Puerto Deseado; de ahí lo sacan en comisión a Comodoro Rivadavia, allí lo secuestraron y luego fue visto por sobrevivientes en “La Cacha”, el centro clandestino en la Plata.
En el caso de Irastorza los padres lo fueron a ver, porque ya estaba por salir y el jefe del Regimiento en Puerto Deseado, les dijo “su hijo desertó, porque lo mandamos en una comisión y no volvió”, pero en realidad lo habían desaparecido.
Él había sido un militante de la Juventud Peronista en La Plata donde militábamos juntos”, relató el reconocido ex legislador santacruceño.
Flores recordó que él desplegó tareas profesionales defendiendo a personas detenidas por la dictadura “Yo he actuado y defendido en casos en los cuales la gente estuvo secuestrada y presa en la cárcel de Rawson”, señaló y puntualmente sobre los dichos de Cristina opinó “Yo creo que Cristina Fernández ha tratado de justificar, en el fondo, por qué no hizo nada por nadie; es como si diijera, “no presentamos Hábeas Cópus porque no tuvimos por quién presentarlos”.
La verdad es que se podría haber hecho con decisión, pero ellos (Néstor y Cristina) no la tuvieron” y también recordó los detalles en los cuales él cumplía con aquella misión de presentar los amparos a favor de los detenidos en Chubut “Yo, en ese momento, viajaba para el CELS de aquella época el de Emilio Mignone y Augusto Conte y viajaba para presentar Hábeas Corpus por gente que estaba detenida sin condena en el penal de Rawson y me hubiera encantado que algún colega de Santa Cruz me acompañara”, se lamentó.
Flores también repasó los malos momentos que le tocó vivir ingresando al penal, donde las autoridades daban órdenes estrictas para que los abogados desistieran de hacer presentaciones y hablar con los detenidos “Ellos (los responsables de la cárcel) ni me preguntaban. Sabían bien lo que yo estaba haciendo, porque no era una actividad clandestina la que cumplía. Me tomaba un avión, me iba a Rawson y presentaba los recursos que me rechazaban todos y cada uno, como correspondía en la época”, rememoró Flores.
Consultado específicamente sobre el rol de la ex presidenta y su esposo en aquellos años, Rafael Flores fue muy claro “Néstor y Cristina en ese tiempo seguían llevando a cabo sus juicios civiles y comerciales y no se metían absolutamente en nada de este tema político. Durante esos años no tuvieron ningún tipo de actividad y yo no los condeno por eso. No era fácil hacerlo” aludió el abogado, debido a las condiciones política s (sic), sociales y de inseguridad que se vivía, donde los que desarrollaban tareas de defensa de los presos políticos, también eran perseguidos.
También Flores recordó cómo llegó a transformarse en defensor de los detenidos en la Patagonia “Yo tuve dos familiares detenidos uno en San Luis y otro en Buenos Aires y recurrí obligado al CELS en ese momento para tener idea de cómo moverme y a raíz de eso, Luis Zamora me propuso si me podía hacer cargo de una cantidad de Hábeas Córpus que tenían que presentar en el penal de Rawson; yo acepté y durante unos años lo estuve haciendo, además de mi actividad en Gallegos, lo cual fue muy gratificante, aparte de lo humillante y penoso que era ir al penal, donde como abogado me hacían desnudar, me decían “agáchese, ábrase los glúteos, la boca…”, todo a propósito porque yo a mis defendidos los veía a través de una pared de vidrio, no había forma de tener un contacto físico con ellos ni “pasarles” nada. Nos hacían esas cosas solo para desanimarnos y que no fuéramos más”, recordó Flores quien remató “no era fácil, había que tener decisión y hubo muchos que no se quisieron exponer a todo eso, supongo”, concluyó.
Los desaparecidos
Fuentes de la Secretaría de Derechos Humanos Secretaría provincial, del Ministerio de Justicia de la Nación y del archivo del Parque de la Memoria porteño, refiere Chequeados.com, contabilizan al menos 6 personas detenidas/desaparecidas en Santa Cruz y 11 santacruceños detenidos y desaparecidos en otras provincias.
De acuerdo a estos registros oficiales, los desaparecidos en la provincia de Santa Cruz serían:
- Juan José Antúnez: desapareció en febrero de 1977 mientras era soldado conscripto en el Batallón de Ingenieros de Combate 181 de Río Gallegos, Santa Cruz.
- Héctor Manuel Irastorza: era médico en el Regimiento de Caballería. Según testimonios de ex detenidos, fue visto cautivo en el centro clandestino de detención “La Cacha” de La Plata, Provincia de Buenos Aires.
- Pedro Llorente Serrano: Carpintero español de 32 años desaparecido en 1977 en Río Gallegos.
- Emilia Patricia Reñanco: Estudiante chilena de 18 años desaparecida en 1978 en Caleta Olivia, Santa Cruz.
- Luis Orlando Vargas: Peón de campo chileno desaparecido en Perito Moreno, Santa Cruz, en 1977.
- José Enrique Valdivia: Chileno desaparecido en Río Gallegos. Su nombre aparece en los registros del Ministerio de Justicia como “presunción de desaparición forzada” pero sin denuncia formal. También está en la lista de la secretaría de Derechos Humanos de Santa Cruz, pero allí está listado como desaparecido.
Detenidos desaparecidos nacidos o relacionados con Santa Cruz, que fueron asesinados/desaparecidos fuera de la provincia:
Walmir Oscar Montoya nació en Caleta Olivia y fue secuestrado en 1977 en la Plata.
Juan Carlos Rosell nacido en Río Gallegos, era diputado provincial mandato incumplido de Santa Cruz al momento de su detención en Buenos Aires el 3 de diciembre de 1976.
Margarita Delgado santacruceña secuestrada en noviembre de 1977 en Ensenada, Provincia de Buenos Aires, con su esposo Horacio Bau y sus dos hijas.
Delmiro Segundo Villagra, nació en Río Turbio, Santa Cruz. Fue secuestrado en diciembre de 1976 en La Plata.
Federico Gerardo Lüdden, santacruceño secuestrado en un operativo ilegal de detención en noviembre 1976 en La Plata.
Ricardo Alberto Cittadini, Estudiante universitario santacruceño, secuestrado en agosto de 1976 en la Ciudad de Buenos Aires.
Inés Magdalena Uhalde nacida en Puerto Deseado y fue secuestrada en agosto de 1976 en Córdoba.
Adriana Cecilia Barcia nacida en Río Turbio, fue secuestrada entre julio y agosto de 1976 en Tucumán.
Marta Ofelia Borrero nació en Río Gallegos y fue secuestrada en enero de 1977 en la Ciudad de Buenos Aires.
Viviana Admetlla nacida en Capital Federal, fue maestra en Calafate y Río Gallegos. Fue secuestrada en 1978 en San Justo, Provincia de Buenos Aires.
Daniel Alberto Toninetti nació en Córdoba, era empleado municipal y fue secuestrado en La Plata en abril de 1977.
(Agencia OPI Santa Cruz)
fuente
"OPI Santa Cruz", 18.10.2017
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