MAXI Y LAZARO
Los negocios que unen a Máximo Kirchner y Lázaro Báez
Se trata de una gomería y una empresa de catering del empresario K prestaron servicios a la inmobiliaria del hijo de Cristina Kirchner.
El perfil empresario de Lázaro Báez
Lázaro Báez construyó un imperio de más de catorce empresas sin un patrimonio de 66 millones de pesos.
Los rubros fueron diversos: empresas ganaderas, constructoras, medios de comunicación, catering, neumáticos, alambrado industrial, alquiler de vehículos, casa de té, hosterías, entre otras; la mayoría de las firmas terminaron teniendo algún vínculo con la familia Kirchner.
Desde el 2006, el empresario K es propietario de Integral Alem, una firma dedicada a la venta de neumáticos.
Al frente de la misma, puso a su hija mayor, Luciana Báez, como socia mayoritaria y a Jorge Bringas, responsable de administrar las estaciones de servicios que el grupo tiene en Río Gallegos.
El año pasado, Integral Alem pagaba, en concepto de “honorarios inmobiliarios”, una suma de $ 5.500 a la inmobiliaria de Máximo Kirchner (Factura “A” N° 00000045).
La factura con fecha de marzo de 2015 está emitida por Negocios Inmobiliarios, la empresa que el líder de La Cámpora tiene junto a Osvaldo Sanfelice, quien se encarga de administrar tres hoteles de la ex Presidenta: Las Dunas, Alto Calafate y La Aldea de El Chaltén.
Integral Alem, dedicada exclusivamente al rubro de neumáticos, funciona en un edificio propio hace muchos años y en la boleta no se especifican mayor detalles de la transacción.
Pero los negocios que vinculan a Báez con el hijo de Cristina Kirchner, no terminan ahí.
En 2012 Lázaro Báez declaró, según consta en la causa Hotesur, ser propietario de la empresa Alternativa S.A.
La firma dedicada al servicio de catering para empresas y eventos, tal como consta en el registro comercial, le pagó a la inmobiliaria de Máximo, sólo en un mes, $ 10.890 en concepto de “administraciones”, tal como figura en la Factura “A” N° 00000055 con fecha del 27 de mayo de 2015.
Alternativa S.A, que produce alimentos que después se venden en las estaciones de servicio que el empresario K tiene en Río Gallegos, está bajo la lupa de la Justicia.
La empresa de catering figura en una extensa lista de 48 firmas vinculadas a Hotesur, que aparecieron en un banco de El Calafate, según la información recabada en el allanamiento que realizó el juez Claudio Bonadío.
Fue cliente no sólo de Hotesur, sino también de la inmobiliaria de Máximo.
En el rubro más conocido y que ya no sorprende, Negocios Inmobiliarios recibió de Austral Construcciones $ 24.098 por mes por el alquiler de un departamento en el edificio de Uruguay y Juncal en el barrio porteño de Recoleta, $ 8.763 por un departamento en la calle Alcorta en Río Gallegos, y otro por el mismo valor pero ubicado en la calle Orkeke de la capital santacruceña, según reveló el sitio Tangoleaks el año pasado.
Pero parece que la época de negocios diversos entre Máximo y Báez son parte del pasado, cuando el dueño de Austral Construcciones admnistraba tres hoteles de la familia Kirchner, garantizándoles ingresos anuales de $ 14 millones por el alquiler de habitaciones, con siete de sus empresas.
Ahota todo es diferente. Desde el entorno del empresario K, señalaron a Clarín que no hay comunicación con la familia Kirchner “desde el año pasado”. Describen la relación como “distante” y los enojos mutuos son secretos a voces.
Lázaro en una reunión con trabajadores de la UOCRA dijo que el kirchnerismo, que tanto lo favoreció durante doce años, le “soltó la mano”.
En el círculo cercano al diputado nacional indicaron que la molestia central es por el “mal manejo de la empresa y los despidos la crisis que generó en la Provincia”, ahora gobernada por Alicia Kirchner.
Negocios eran los de antes.
(Fuente: Clarín)
fuente
"nexofin", 01.03.2016
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