15 may 2017

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IMPRUDENTE INCONTINENCIA PERIODÍSTICA





Página/12 “informó” la dirección de un represor pero logró que escrachen a un jubilado homónimo
08 MAY 2017 – DIEGO ROJAS


En el pirulo de tapa del domingo publicaron la dirección de Luis Muiña, pero no se trataba del represor beneficiado por el 2×1 sino de un vecino con el mismo nombre, que recibió amenazas. 

Fuegos artificiales y la organización de un escrache equivocado producto de la irresponsabilidad de no chequear la información.

El jueves 4, por la noche, los cielos de Caballito norte se vieron iluminados por fuegos de artificio

Era la jornada en la que los jueces de la Corte Suprema habían fallado a favor de la libertad del represor de la dictadura Luis Muiña basándose en la extinta ley del 2×1, beneficio que podría ser extensible a muchos otros criminales del gobierno militar actualmente presos. 

Algunas personas pensaron que los estruendos se trataban de festejos por el repudiado fallo de la Corte. 

Si cualquier persona googlea sin demasiado esfuerzo información sobre Luis Muiña, aparece que vive en Caballito, en la calle Bertrés al 500. 

Listo, la teoría cierra: se trataba de los festejos por la libertad del criminal. 

El domingo, el clásico pirulo de tapa del diario Página/12 daba como veraz la especulación y, no sólo eso, publicaba la supuesta dirección desde donde se habrían lanzado los fuegos artificiales. 

Una invitación a escrachar al represor.

muiña bueno 1
Luis Muiña, el jubilado confundido con un represor por la irresponsabilidad de Página/12


La indignación cundió en las redes. 

Muchos vecinos de Caballito se acongojaron por tener que compartir el vecindario con un delincuente que integró un grupo de tareas en el hospital Posadas bajo la dictadura y formó parte del equipo de torturadores y asesinos comandados por el dictador Reynaldo Bignone. 

La información de Página/12 confirmaba que el represor podría cruzarse con cualquier vecino, de cualquier sexo, de cualquier edad, liberado de manera arbitraria por un fallo vergonzoso de la Corte. 

Un mensaje comenzó a circular por whatsapp: “Bertrés 558. Caballito. Domicilio donde vive el genocida Luis Muiña, recientemente liberado. ¡Si no hay justicia debe haber escrache! Viralizar!

Y se viralizó, con la referencia de autoridad de haber sido publicado en un diario de tirada nacional.

El pirulo de tapa de la discordia.
El pirulo de tapa de la discordia.

Este cronista vive a la vuelta de Bertrés al 500 y, a pesar de no haber escuchado el jueves por la noche los estruendos de los fuegos de artificio, se indignó ante la posibilidad de cruzarse con un torturador en cualquier momento del día. 

Cerca de la noche, se acercó a la dirección citada por la cadena de whatsapp. Un hombre salió a la puerta.

-¿Estás buscando a alguien? -preguntó el hombre canoso.
-¿Acá se mudó Luis Muiña, el represor? -respondió este cronista.
-No, Luis Muiña soy yo, pero no tengo nada que ver con esa persona.

El hombre contó que había sido hostigado esa tarde por personas que lo insultaron al verlo en la puerta de su casa. Que otras desde un auto le gritaron y lo amenazaron diciendo que se cuide, que iban a volver: “Me gritaron desde la esquina, después el auto dio la vuelta y se paró en la otra esquina, yo quise explicarles, pero no los alcancé y se fueron entre puteadas”

Una mujer sale de la casa, atemorizada: “Tienen que decir que mi esposo no es ese Muiña, no tenemos nada que ver con la dictadura, dice, angustiada. 

Su nieto permanece dentro, y le piden que no salga. “Yo tenía una imprenta, soy jubilado, tengo 71 años y no tengo nada que ver con el otro, que leo que es diez años más joven -dice Luis Muiña, el falso represor señalado así por Página/12-. 

No entiendo por qué pasa esto”

El jubilado desconocía que su dirección había sido publicada en el diario kirchnerista y cuando el cronista le explica la mujer se alarma: “Ay, no. ¿Y ahora qué puede pasar?”. “¿Te parece que llamemos a la comisaría? Pero por ahí si ven un custodia van a pensar que confirmaron que acá está el tipo ese, pregunta Muiña, el jubilado.

Muestra su documento. La mujer cuenta que una vez la llamaron y preguntaron si su marido había trabajado en el hospital Posadas durante la dictadura. 

“Es que mi número figura en guía, cualquiera puede llegar a mí”

Hasta un diario, en un ejercicio de extrema liviandad periodística, como se puede apreciar. 

Una irresponsabilidad producida en medio de la indignación generalizada por la posibilidad de que Astiz, “El Tigre” Acosta, Ricardo Cavallo y 278 represores más caminen libres por la calle en un acto de impunidad.

Los datos del padrón de Luis Muiña, jubilado.
Los datos del padrón de Luis Muiña, jubilado

Un simple chequeo hubiera bastado para deshacer esa conjetura, que periodistas de ese mismo diario habían convalidado en las redes sociales días antes de la publicación en el pirulo de tapa. 

En la causa, de acceso público, figura el número de documento, la edad y el domicilio declarado del represor, en el partido de Merlo

En los registros públicos, como el padrón, resulta evidente que el Luis Muiña de Caballito es mayor y con un número documento diferente. 

Luego, cualquier periodista antes de publicar una dirección de un supuesto represor liberado por un fallo polémico y rechazado por la mayor parte de la sociedad debería haber chequeado sencillamente su hipótesis. 

Un llamado de teléfono o el acercarse hasta el lugar de los hechos habrían bastado.

Todavía tienen temor. Aún circula el llamado al escrache en el tranquilo pasaje Bertrés, en Caballito. 

Ayudame en lo que puedas para que esto no pase a mayores. Te paso fotos de los años que supuestamente debería haber estado en cana, lo que quieras, esto se puede descontrolar”, dice Luis Muiña, el hombre escrachado por llamarse igual a un represor. 

Y por los fuegos artificiales que algunos medios se apuran en publicar como ciertos

En 2011, cuando el represor estaba tras las rejas.
En 2011, cuando el represor estaba tras las rejas.

En 2012, en Córdoba.
En 2012, en Córdoba.

Junto al dictador Bignone, el verdadero represor Luis Muiña.
Junto al dictador Bignone, el verdadero represor Luis Muiña.


Fuente

“BORDERPERIODISMO”, 08.05.2017

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Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio


Mendoza, 11 de noviembre de 2009.