Al Intendente de Caleta Olivia le faltan alrededor de 40 millones de pesos para el pago de sueldos
12/11 – 10:00 – La situación difícil por la que atraviesa la municipalidad de Caleta Olivia, no es privativa de esa ciudad, ya se vivió en Río Gallegos, donde el Intendente renunció y del cual ya nadie habla.
En la capital, el intendente interino encontró 340 mil pesos en la caja; en Caletea Olivia no hay seguridad, ni siquiera, que haya ese monto en efectivo.
Los municipales de paro, los sueldos sin pagar y un faltante de fondos que abre un interrogante para el nuevo intendente electo.
Tal como hemos venido sosteniendo todo el tiempo, Caleta Olivia y Río Gallegos son municipios inviables, no pueden auto sustentarse, están superpoblados y los déficit que enfrentan lo hacen inviable en términos prácticos.
Hasta hoy se sostuvieron con los fondos nacionales, pero ante la salida irremediable de la presidenta del poder y las dudas de si en realidad Daniel Scioli va a conseguir la presidencia, lo cual les podría asegurar cierto “aire financiero”, las dos mayores municipalidades de Santa Cruz corren la misma suerte y de ellas Caleta Olivia es la más comprometida.
A Río Gallegos ya “la sanearon”, sacando al intendente e inyectando fondos nacionales pensando en sostener la gobernabilidad de un intendente K, sin embargo, por la Ley de Lemas, a pesar de haber sido Pablo Grasso el más votado, ganó el Ingeniero Roberto Giubetich (FUPVM), quien recibirá un municipio con gran déficit, pero al menos, con algunas obras que había abandonado el anterior intendente Raúl Cantín, ya avanzadas o realizadas, como es la pavimentación de las calles, semaforización, etc. Pero el gran problema del municipio de Río Gallegos (como el de Caleta) es la plantilla de empleados, desfasada totalmente en su relación con la cantidad de habitantes y obviamente altamente deficitarias ante la enorme erogación de fondos en materia salarial que tienen mensualmente.
Caleta Olivia ni siquiera “ha tenido la suerte” de que el FPV soñara en sostenerla y por lo tanto al Intendente José Córdoba lo han ayudado con cuentagotas en estos últimos meses desde nación, desde donde ya no le puede enviar más fondos por tres razones: primero, porque Córdoba hizo todo mal y condenó a Caleta al recambio político, debido a su mala gestión y la corrupción imperante y a su negativa a apoyar la candidatura de Fernando Cotillo como intendente; segundo porque si pierde Scioli, no habrá más un canal de plata disponible con el gobierno nacional y tercero, porque quien ganó las últimas elecciones es Facundo Prades de la oposición (Unión para Vivir Mejor).
En este marco, se entiende que el intendente Córdoba no pueda pagar los sueldos. No tiene plata y con las remesas de fondos que les envió Nación, no llega a los 30 millones de pesos más 7 millones, que dicen desde Hacienda poseer la municipalidad en materia de recaudación, tendría alrededor de 40 millones y debe contar con más de 70 millones de pesos para poder cubrir el total de los salarios del sector municipal.
El SOEMCO (sindicato de empleados municipales) hace más de un mes que está de paro y en los últimos días, empleados del sector de recolección, plantaron una medida de fuerza individual, al punto que ayer estuvieron a un paso de cortar la ruta nacional Nº 3, pero desde el sindicato la dirigencia dijo no estar apoyando la medida de los recolectores de residuos.
Con este panorama y ante la posibilidad cierta de que el intendente Córdoba no pueda destrabar más fondos para cumplir con el pago de haberes, cuyo término legal venció el día viernes pasado, el panorama del traspaso de esta gestión a la nueva, encabezada por el intendente electo Facundo Prades, se haría en medio de un caos institucional, financiero y gremial.
No se conocen hasta el momento cuáles son las estrategias que van aplicar las nuevas autoridades para estabilizar una municipalidad como la de Caleta Olivia, altamente deficitaria y donde la corrupción atraviesa la gestión de Córdoba, como la de su antecesor, Fernando Cotillo. El trabajo es grande y arduo, pero no se han podido establecer señales de qué hará Prades y su equipo de gobierno, luego del 10 de diciembre.
Extraoficialmente se conoce que el intendente electo se habría reunido con el equipo de Mauricio Macri en Buenos Aires y que haría lo propio con la electa gobernadora de la provincia, Alicia Kirchner; sin embargo Caleta Olivia está inmersa en un caos social e institucional, que pone entre signos de interrogantes la gobernabilidad de la intendencia, por parte del nuevo jefe comunal electo. (Agencia OPI Santa Cruz)
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