3 ene 2016

ENTRE RÍO: CRUJIDOS VS. AGRADECIMIENTO

ENTRE RÍOS: 
CRUJIDOS VS. AGRADECIMIENTO


AY AY AY AY!!!

Los insólitos carteles del exabrupto

En forma desfachatada en Paraná y en otras ciudades del interior, aparecieron carteles con la frase “Gracias Urribarri – Ahora en Entre Ríos tenemos futuro”, justo en el momento que los entrerrianos comienzan a ver que ese futuro se complica debido a la pésima gestión del “gran soñador entrerriano”. 
 
Mucho de lo que ocurre con las inundaciones en la costa del Río Uruguay obedece a ese deplorable gobierno urribarrista. 
 
La corrupción generada en los ochos años que Urribarri estuvo al frente del ejecutivo no tiene parangón en la historia de la provincia. 
 
Quizás esos carteles buscan dar otro mensaje más cercano a la realidad: Que gracias a Urribarri en Entre Ríos habrá futuro si prosperan en la Justicia las causas iniciadas en su contra. 
 
Sea como sea, acá va una nota en la que el autor expone con claridad la irrealidad de esos carteles.
 
"(...) ¿Sobre qué bases sólidas y concretas se decidió reivindicar a Urribarri luego de una gestión donde se multiplicó inconcebiblemente la deuda del Estado, se manejaron los salarios de los agentes estatales con criterio dictatorial haciendo de las paritarias una entelequia, se vulneraron mandatos de la Constitución provincial, se ignoraron normas precisas que rigen sobre el peculado, exhibiéndose conductas ligadas a un proyecto personal casi megalómano, que terminó en fracaso cuando Cristina Fernández convirtió su dedo en veleta y apuntó hacia otra dirección? (...)"
 
por LUIS MARÍA SERROELS
 
PARANÁ (Especial para Urgente24). Con muy buenos ojos se hubiera visto que la dirigencia del Frente para la Victoria se aviniese a llamarse a silencio para analizar, puertas adentro y desde diferentes ángulos, la situación derivada de su floja performance electoral el 25 de octubre y su desplome del 22 de noviembre. 
 
En Entre Ríos, el solitario triunfo en la categoría “gobernador” por un margen austero que no le resta legitimidad, debería generar preocupación y prudencia a la vez. 
 
Nadie pretende que los responsables del mal gobierno nacional y provincial sean quemados en la hoguera política, ni mucho menos.
 
Pero, como mínimo, se aguarda un profundo examen de conciencia y un baño de humildad a la hora del balance. 
 
Cristina Fernández terminó su mandato ostentando el triste privilegio de no haber logrado que el país crezca en los últimos cuatro años. 
 
En nuestra provincia, a Sergio Urribarri no le bastaron dos gestiones consecutivas para alcanzar su proclamado y frustrado “sueño entrerriano”. 
 
Su sucesor deberá cargar con un cuadro financiero frustrante y desalentador, mientras graves acusaciones arriban al Palacio de Justicia. 
 
Por ello el nuevo año preanuncia alternativas impredecibles no exentas de efervescencia social. 
 
A las utopías urribarristas las barrió el viento de la improvisación y la ineptitud.
 
Partiendo de la base de que el principal derrotado el 25 de octubre fue el gobernador saliente, no se comprende que en los últimos días hayan comenzado a aparecer en la zona del Centro Cívico pasacalles donde se expresa Gracias Urribarri-Ahora en Entre Ríos, tenemos futuro
 
Sólo un ilimitado fervor militante podría explicar semejante exabrupto.
 
Es muy difícil entender qué se busca con esta alusión al ex principal habitante de la Casa Gris, pero si el actual mandatario se decidiera a darle a la ciudadanía un informe exhaustivo y pormenorizado de las cuentas públicas provinciales, ese mensaje callejero rayaría en el delirio.
 
No se sabe si es la complejidad y el desorden de los números o el negro panorama que se cierne para 2016 lo que retarda la difusión clara y descarnada de cuanto les aguarda a los entrerrianos. 
 
El silencio suena fuerte cuando trae consigo la posibilidad del lápiz rojo que dibuja futuros dolores de cabeza. 
 
Ya demasiado dura fue la política impositiva urribarrista que castigó el bolsillo de los contribuyen impiadosamente, como para sintonizar los planes actuales en esa frecuencia tan temida como facilista.
 
Sólo las buenas migas que parecen cobrar forma entre Bordet y Mauricio Macri, teniendo como valioso enlace al ministro Rogelio Frigerio, podrían abrir caminos para atemperar la crudeza de los ajustes.
 
Se supone –porque la orfandad informativa lo permite- que los compromisos y vencimientos que pondrán en duro trance al presupuesto 2016, serían el motivo de la demora en darse a conocer a los entrerrianos dónde se está parado. 
 
Es lo menos que debería hacerse y no por concesión graciosa sino porque es un derecho legítimo de los gobernados.
 
Adviértase que palabra "futuro" –tan visible en los letreros de marras-, no supone nada más que un devenir, lo que está por venir, lo que sucederá, el destino, la posterioridad, lo que ha de ser. 
 
¿Sobre qué bases sólidas y concretas se decidió reivindicar a Urribarri luego de una gestión donde se multiplicó inconcebiblemente la deuda del Estado, se manejaron los salarios de los agentes estatales con criterio dictatorial haciendo de las paritarias una entelequia, se vulneraron mandatos de la Constitución provincial, se ignoraron normas precisas que rigen sobre el peculado, exhibiéndose conductas ligadas a un proyecto personal casi megalómano, que terminó en fracaso cuando Cristina Fernández convirtió su dedo en veleta y apuntó hacia otra dirección?
 
Párrafo especial para el intento irracional de celebrar contratos con China que a la provincia le significarían una nueva deuda por 430 millones de dólares y para lo cual se hizo autorizar ilegítimamente por la Legislatura en sesiones exprés apenas horas antes de arribar el 2015.
 
Todo el mundo tiene un futuro y ello es inevitable. 
 
La cuestión es si se dará para bien o para mal, pero de ningún modo supone a priori abundancia, carencia, éxito, fracaso, fortuna o pobreza, simplemente porque es lo ignorado que está por llegar. 
 
Se requiere ser una Sibila o una Pitonisa hechas y derechas para poder adivinarlo. 
 
El futuro vendrá fatalmente, quiérase o no, pero ha de suceder gracias al designio de los tiempos y no por obra de ningún gobernante, sea o no esclarecido. 
 
Lo que se realice para que ese porvenir sea mejor para todos, deberá ser también fruto del esfuerzo conjunto.
 
Las denuncias periodísticas de las últimas semanas sobre graves delitos, lejos están de constituir culpabilidades mientras no queden demostradas en sede judicial. 
 
Empero hasta ahora el ex gobernador no acusó para vindicarse como ordena el artículo 39º del estatuto provincial (hoy sigue siendo funcionario en uno de los poderes del Estado). 
 
Se desconocen sus declaraciones juradas y sólo hubo precisiones de su letrado que poco aportan al meollo del asunto. 
 
Consecuencia de las notas de Análisis se produjeron presentaciones ante la justicia de dos abogados en ejercicio de su profesión y en cumplimiento de su irrenunciable juramento, tan legítimo como el del profesional que patrocina al ex mandatario.
 
Los ataques destemplados contra esos abogados –incluso solicitando sanciones de los cuerpos colegiados en una actitud de supina ignorancia y clara alcahuetería- surgieron de una maniobra corporativa estéril, porque a las decisiones de los jueces no las inclina quien la tienen más larga (como dice el incomparable Joan Manuel Serrat) ni quien vocifera más estridentemente. 
 
No fueron pocas las personas cuya identidad apareció en un comunicado solidario, que nunca fueron consultadas para figurar.
 
El actual gobernador entrerriano demuestra ser muy medido en sus declaraciones, pero –esclavo de sus palabras al fin-, no ha cumplido con su promesa de pedir que tome licencia cada funcionario señalado por algún delito. 
 
Urribarri está bien resguardado en sus fueros pero el representante del Estado provincial ante el Bersa y el titular del Instituto del Seguro quedarían comprendidos en la advertencia más que oportuna de Bordet. 
 
Cobijarse en una banca legislativa no impide que la llama política se extinga.
 
Es cierto que muchas decisiones poco simpáticas que puedan adoptar Mauricio Macri y Gustavo Bordet, serán consecuencia de situaciones heredadas. 
 
Las críticas que van saliendo del kichnerismo derrotado culpando por medidas que son producto inevitable de desaciertos cristinistas, mueven a risa.
 
Metafóricamente, ¿es sólo el último trago de la botella el que provoca la borrachera? 
 
Del brebaje político que debieron beber los argentinos el último gobierno, no se puede responsabilizar a los sucesores apenas a tres semanas de asumir. 
 
La ebriedad no se produce por la última copa: comienza con la primera.
 
El capital político de Sergio Urribarri se va deteriorando como ocurrió con las palmeras de Colón que llevó a Mar del Plata para formar parte de un aparato proselitista burdo y ridículo, financiado con recursos de ignoto origen. 
 
En la vereda de enfrente, otros pasacalles más bien podrían decir “Gracias a Urribarri, el propio urribarrismo está en crisis”. 
 
En política, el hastío no tiene fecha de vencimiento. 
 
Y resulta implacable.
 
fuente
"urgente 24", 02.01.2016

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¡BIENVENIDOS, GRACIAS POR ARRIMARSE!

Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio


Mendoza, 11 de noviembre de 2009.