A casi un año de la quiebra de Cresta Roja, Karina Rasic, que ocupó el cargo de gerenta de la segunda avícola más importante del país, decidió romper el silencio.
Rasic culpó por la quiebra de la empresa al ex secretario de Comercio, Guillermo Moreno, deslizó que Cristina Kirchner les quiso robar la empresa y sostuvo que otra causa de la crisis fue la fuerte resistencia del gremio de la alimentación.
Además, negó tener dinero en el exterior, señaló que la política de precios máximos impulsada por el kirchnerismo los perjudicó, criticó al gobierno de Mauricio Macri -lo calificó como "kirchnerismo de buenos modales" por no haberlos recibido- y aseguró que su familia "no es fraudulenta".
-¿Por qué quebró Cresta Roja?
-Primero, por la gente. Los que estaban radicalizados eran mayormente de izquierda y venían a hacer política en vez de trabajar.
Dentro de ese grupo había un ausentismo enorme, que ahora, obviamente, no se da porque ese personal no fue reincorporado.
Los líderes nunca colaboraron para llegar a una solución.
Tuvimos un montón de tiempo para dialogar, porque cuando entramos en convocatoria tuvimos 18 meses.
-¿Hubo causas externas?
-Hubo falta de acción del Gobierno. Antes de declararnos en convocatoria ya conocían la situación que vivía la compañía desde 2011.
No quisieron ayudarnos. Hubo gente a la que ayudó y gente a la que no. Gente no honesta, que no iba a devolver la plata y gente que, por ahí, sí la está devolviendo.
-¿Alguna empresa avícola?
-No; en general. Hay empresas que vos ves que ellos le dieron un montón de préstamos que algunas seguramente van a devolver y a otros le dieron dinero que nunca más vamos a ver.
A Rasic había posibilidades de ayudarla.
Era una empresa grande que tenía 3.200 empleados. No estaban para ayudar a los empresarios honestos, estaban para ayudar a los que hacían negocios con ellos.
-¿Cómo influyó la economía?
-El precio de las commodities y el valor del dólar, entre una serie de variables, no fueron buenos para el negocio.
Depende de la empresa y de qué medidas haya tomado en su momento el poder tener más o menos aguante y poder darla vuelta.
Las crisis duran dos o tres años, acá la crisis de la avicultura duró seis.
-¿Cuál fue su relación con el gobierno de Cristina Kirchner?
-Cristina nos odiaba. Además, un funcionario me dijo que se querían quedar con la empresa, que metían a su gente y listo.
Cristina Kirchner nos quiso robar la empresa.
-¿Cómo influyó la política de precios máximos?
-Una de las causales del debilitamiento fue la falta de pago de los subsidios.
A Rasic se le debía, entre intereses y demás, casi u$s100 millones. Se le terminó pagando creo que 20% o 25% y en bonos en pesos.
Es ridículo y terminó afectando a la empresa. Si te sacan u$s100 millones de tu capital, lo que tenés que hacer es incorporarlo inmediatamente al flujo de alguna manera.
¿Quién te va a prestar esa cantidad en una economía cayéndose y aliada con Venezuela? Era una empresa que nunca había pedido crédito bancario.
-¿Cuál fue el rol de Guillermo Moreno?
-Fue el primer golpe fuerte que nos sacó de la vía.
Nos hizo poco competitivos y nos puso en un lugar donde, si no se volvía a reincorporar el dinero (la deuda del Estado), ya estabas llegando al precipicio.
A menos que hubiese un cambio en la economía. Eso inició la quiebra.
-¿Pero por qué Granja Tres Arroyos pudo salir adelante y Cresta Roja quebró?
-Nosotros poníamos nuestro propio dinero. Tres Arroyos tiene otra política sobre cómo financiar su proceso productivo.
Quizás habían ahorrado más dinero y tenían más espalda.
-¿La empresa o la familia sacó plata afuera del país o tienen sociedades off shore?
-Si hay cuentas afuera las tienen que encontrar. Hoy se pueden buscar, no es difícil. Nadie me las trajo.
-¿Y las propiedades? Hay una investigación que dice que vendieron una casa de u$s2,5 millones, pese a tener los bienes inhibidos.
-Mi mamá y mi tía viven ahí hace muchísimos años. Se dicen pavadas.
-¿Cómo vivió la quiebra?
-Además de preocuparte por la gente que pierde su trabajo, cuando tenés un fracaso te salen a matar todos.
Nos dejó una mancha, porque nos trataron de empresarios fraudulentos y no lo somos. Somos honestos y quiero que quede claro.
-¿Qué cambió con la llegada de la nueva administración?
-En términos económicos, tomaron decisiones importantes, como pagar la deuda externa y sacar el cepo al dólar.
"Respecto de los discursos y las actitudes es un kirchnerismo de buenos modales. ¡Nunca nos llamaron!", aseguró a La Nación Karina Rasic.
fuente
"iProfesional", 16.10.2016
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