28 feb 2019

EDUCACIÓN: ANÁLISIS DE COSTOS













EDUCACIÓN:
ANÁLISIS DE COSTOS


La inversión educativa argentina se ubica por encima del promedio regional y el 90% se destina a salarios



Federico Poore

27 Febrero, 2019


El gasto público en Educación como porcentaje del PBI está entre los más altos de Latinoamérica. 

Sin embargo, la mayor parte de este presupuesto se destina a salarios y desde 2016 la inversión se redujo. 

Cómo es la situación en la provincia de Buenos Aires.
Durante una entrevista en el programa “Odisea Argentina”, el especialista en políticas educativas Alieto Guadagni aseguró que la Argentina es uno de los países de la región que más invierte en educación.
“Somos en América Latina uno de los países que gasta más en Educación como porcentaje del PBI. Sacando Cuba debemos ser nosotros probablemente los segundos”, sostuvo Guadagni durante el reportajeque le hizo Carlos Pagni.
Pero, ¿cuánto realmente destina el país a la Educación?
Las estadísticas sobre gasto público en Educación como porcentaje del Producto Bruto Interno (PBI) que publica el Banco Mundial con datos del Instituto de Estadística de la UNESCO recopilan la situación de todos los países de América Latina. 
Allí se observa que Cuba es, efectivamente, el país latinoamericano que más invierte en Educación (12,84% del PBI en 2010, según las últimas cifras disponibles) y que la Argentina se encuentra entre las naciones de la región que más recursos propios dedica al área educativa, aunque no en segundo sino en séptimo lugar. 
Si se toman las cifras de años comparables (solo países latinoamericanos con cifras para 2015, 2016 y 2017), el país está cuarto.
En 2016, la Argentina destinó el 5,57% de su PBI a la Educación, una cifra superior al 5,1% que destinaron en promedio a este sector los países de América Latina y el Caribe y al promedio mundial de 4,4% (ver Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo 2019 de la UNESCO), colocándose en el puesto número cuatro entre los 12 países de la región analizados. 
Incluso considerando los recortes en Educación previstos para este año (ver esta nota), es muy probable que la inversión educativa en la Argentina esté por encima del promedio regional.
“Es relativamente cierto que la Argentina es uno de los países de Latinoamérica que más gasta en Educación”, explicó el economista Agustín Claus, investigador y docente de Economía de la Educación de Flacso, a Chequeado.
“Sin embargo, para poder comparar la inversión educativa medida como porcentaje del PBI de cada país habría que considerar la escala: tanto Brasil como Bolivia gastan más que nosotros, pero su esfuerzo es totalmente distinto si se tiene en cuenta su población en edad educativa”.
Para el especialista, la particularidad de la Argentina “es que la mayor parte (arriba del 90%) de los presupuestos educativos son salarios, con lo cual más que inversión educativa, estamos hablando de inversión en salarios docentes”.
De acuerdo con un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en 2017 la Argentina destinó el 93% de su presupuesto educativo al pago de salarios, mientras que México asignó el 92% de sus recursos a sueldos, y Brasil el 73 por ciento. 
En promedio los países que integran esta organización, entre los que se encuentran Alemania, Estados Unidos y Japón, entre otros, dedicaron un 79% de los fondos educativos para salarios.
El aumento en la inversión educativa de los últimos quince años obedece, en parte, a los dictados de la Ley de Financiamiento Educativo, que se propuso destinar en 2010 el 6% del PBI a la Educación, Ciencia y Tecnología. 
En 2014, un cambio en la base del PBI calculado por el Gobierno nacional indicó que no se había llegado al 6% de inversión en relación con el PBI, como sí ocurría con la base anterior.
“A pesar de esto, es incorrecto afirmar que la ley no se cumplió sobre la base de una serie de PBI que no existía al momento de su implementación. Además, con la nueva serie de PBI el indicador de referencia partió de un nivel menor, alcanzó 3,8% en 2005 y ascendió al 5% en 2010, logrando un aumento del 31% que fue exactamente igual al que se proponía la Ley de Financiamiento Educativo al ser sancionada (que definía un aumento del 4,6% al 6%)”, explicaron en un documento Pablo Bezem, Florencia Mezzadra y Axel Rivas, entonces investigadores del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (Cippec).
Con respecto a lo ocurrido en los últimos años, Claus aseguró que el país incrementó de manera sostenida la inversión en Educación, Ciencia y Técnica hasta 2015 (ver chequeo e informe del Cippec sobre el cumplimiento de la Ley de Financiamiento Educativo).
“Desde 2016 hasta la actualidad, la inversión tendió a reducirse con distintos impactos. Hay programas que tendieron a desaparecer y otros que, si bien se achicaron, aún persisten como instrumentos de políticas educativas”, sostuvo.
Según el experto, el desafío en el largo plazo consistirá en discutir el financiamiento educativo, no en términos de porcentaje del PBI sino del proyecto político educativo, y discutir los criterios de la distribución de los fondos nacionales a las provincias en función de las necesidades, capacidades y esfuerzos realizados por cada distrito.

La situación en Provincia de Buenos Aires

En Provincia de Buenos Aires, y de acuerdo con datos de la Dirección Provincial de Estadística, la inversión en Educación representó en 2017 un 4% del Producto Bruto Geográfico (PBG). Para llegar a esta cuenta, los especialistas en estadísticas educativas como Agustín Claus recomiendan dividir los gastos asignados a la Dirección General de Cultura y Educación por el PBG, equivalente a lo que a nivel país se conoce como Producto Bruto Interno (PBI).
* En millones de pesos corrientes
Actualizando estas cifras, y tras analizar el Presupuesto 2019 aprobado en noviembre último, el Instituto para el Desarrollo Económico y Social de Buenos Aires perteneciente a la CTA concluyó que una de las áreas más afectadas por el ajuste en los gastos fue la Dirección General de Cultura y Educación
En 2019, este área perdería 2,1 puntos porcentuales en el gasto provincial al pasar del 26% del gasto en 2018 al 23,9% en 2019. 
“En relación al 2015, la pérdida acumulada a 2019 sería de 5,7 puntos porcentuales”, concluye el informe.

Fuente
“Chequeado.com”, 27.02.2019

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¡BIENVENIDOS, GRACIAS POR ARRIMARSE!

Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio


Mendoza, 11 de noviembre de 2009.