INEVITABLE / RACIONALIDAD

 

 

 

 

 

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Se rompió el chanchito y ya no hay dólares para postergar el acuerdo por la deuda con el FMI

 

22/12/2021

 

Walter Brown

Jefe de Redacción

 

 

 

Ya no hay más dólares. 

 

 

Los recursos se agotaron y los argentinos se enfrentan a la realidad de una delicada situación financiera.

 

 

Con el pago de casi u$s 1900 millones realizado ayer al Fondo Monetario Internacional, la Argentina extinguió casi la totalidad de los u$s 4334 millones en Derechos Especiales de Giro que el organismo envió hace apenas cuatro meses, como parte del aporte extraordinario a los países miembros para combatir la crisis desatada por la pandemia de Covid-19. 

 

Y en las reservas del Banco Central apenas hay combustible suficiente para transitar el próximo bimestre pero ya no se encuentran fondos para afrontar los fuertes vencimientos que se avecinan en 90 días.

 

 

 

 

 

Se podrá reclamar por el uso otorgado al préstamo de u$s 44.000 millones que recibió el país durante el gobierno de Mauricio Macri.

 

Repartir culpas entre los funcionarios argentinos y quienes conducían el FMI por entonces, a partir de la auditoría realizada por el propio organismo financiero. 

 

Y con esos argumentos pedir al Fondo que acceda a flexibilizar condiciones para alcanzar un acuerdo.

 

 

Pero lo concreto es que el tiempo se agota y la dilación de las negociaciones solo agrega incertidumbre a un escenario que tiene a particulares y empresas viviendo en el corto plazo.

 

el problema de dilatar un acuerdo con el fmi 

 

¿Cómo proyectar un año sin saber si la inflación superará el 50% como prevén los analistas o descenderá al 33% como establecía el malogrado proyecto de Presupuesto, si el rebote se convertirá en crecimiento, si se recuperará el crédito externo, si las tasas de interés reales serán positivas como pide el FMI o seguirán en terreno negativo, si el déficit fiscal se reducirá a niveles en los que no se necesite acudir a una emisión monetaria que recaliente los precios, si la inversión llegará, si el consumo crecerá, si se achicará la brecha cambiaria y el dólar paralelo y los financieros treparán hasta los $ 300 o se acercarán a un oficial que cotice a la mitad de ese valor, si se extenderá el control de precios, si se eliminarán restricciones al comercio exterior...?

 

Tras el impasse electoral acordado con el FMI, el 2021 se va con la promesa incumplida de cerrar el acuerdo antes de cambiar el almanaque y un Gobierno en el que si bien predominan las voces de funcionarios que remarcan la intención de cumplir con los compromisos, no falta el que llama a desconocer la deuda.

 

El pasivo con el Fondo alcanza apenas a un 16% de los u$s 268.416 millones que registraba la deuda externa argentina al cierre del tercer trimestre del año. 

 

Pero es necesario que, más allá de la pirotecnia verbal en tiempos de fiestas navideñas, el acuerdo se concrete cuanto antes y se establezca una hoja de ruta para el 2022 y los años que vendrán.

 

Cuanto más se dilate, también lo harán las decisiones de inversión y ahorro que el país requiere para mejorar su producción, aumentar sus exportaciones y generar los dólares que le ayuden a ordenar sus cuentas y proyectar el crecimiento.

 

fuente

"EL CRONISTA", 22.11.2021