DESPUÉS DE LA TOMA
El Limón sin asistencia
Las imágenes del río El Limón arrasando todo a su paso dieron la vuelta al mundo.
No es la primera vez que sucede, pero las circunstancias han cambiado demasiado en más de 30 años, y los afectados por esta última inundación lo están sufriendo en carne propia.
Los expertos meteorólogos advirtieron hace unos días que el fenómeno climatológico La Niña golpeará el país.
Sin embargo, nadie puede decir que el régimen esté preparado para hacerle frente a las consecuencias.
Quizás se deba a que siguen al pie de la letra lo que hizo su comandante intergaláctico con la tragedia de 1999.
Desde hace más de 20 años, los desastres naturales dan paso a desastres humanitarios muy rápido y el origen de esto es la total incompetencia del régimen en articular acciones que ayuden a la población.
No solamente necesitan que los recursos se destinen a limpiar lo que queda después de una inundación como la que causó el río en Aragua, sino ayuda precisa y específica para los residentes que perdieron todo.
Lo que ocurre después de una tragedia de este tipo es que la gente se queda en la calle expuesta a infecciones y toda clase de enfermedades.
Si a esto se le suma que las casas que quedaron en pie ni siquiera cuentan con agua corriente, lo que puede suceder es bastante grave.
No hay que olvidar que lo que se llevó el río no fue solamente material.
Hay vidas que quedaron truncadas y que ahora se estarán preguntando cómo salir de esta tragedia porque saben que no recibirán ninguna ayuda para recuperar lo que perdieron.
Justo en este momento, con pandemia y un sistema de salud completamente colapsado, tampoco tienen adónde recurrir si se sienten enfermos o si los niños necesitan atención.
No dejará de llover por lo pronto.
Y hay otras zonas en el país que están en serio riesgo de sufrir lo mismo que lo que pasó en Aragua.
¿El régimen seguirá haciéndose el loco?
¿Seguirá concentrado en montar su trampa electoral sin importarle el destino de los venezolanos que requieren ayuda del Estado?
Ya sabemos cuál es la respuesta, porque no han dejado espacio para la duda.
Si hace tiempo no les importa lo que sucede con los venezolanos que no tienen ni qué comer, mucho menos se interesarán por los que pierden sus casas.
Y lo que es peor, no les alcanza el dinero para construir más edificios de la Misión Vivienda, porque lo que han sacado de las arcas de la nación lo están usando para su propio beneficio.
Así que lo que pueden hacer los vecinos de El Limón es rezar.
Pero es bueno sugerirles también que se sumen a la lucha, porque no hay mejor momento que el actual para exigir un cambio.
Los venezolanos se merecen un gobierno que piense en el país primero.
fuente
EL NACIONAL", Venezuela, 14.09.2020
No hay comentarios:
Publicar un comentario