1 ago 2021

NI CAJERO… NI BILLETES

 

 

 

NI CAJERO… NI BILLETES

 

 

 

Inflación en Venezuela acelera la desaparición de los cajeros y oficinas bancarias

 


 

La crisis económica y la pandemia, así como el alto encaje legal ha hecho que los bancos cierren agencias y reduzcan gastos

El BCV reparte los billetes a las bóvedas principales de las entidades bancarias, pero no es suficiente para surtir a todo el país

Esto explica la acentuada falta de efectivo

 

El secretario general de la Federación de Trabajadores Bancarios y Afines (Fetrabanca), Claudio Rivas, dijo a Efe que en diciembre de 2019 registraron 7.512 cajeros automáticos en el país. 

Sin embargo, un año después quedaban 5.762, lo que representa una caída de 23%.

«Esa cifra ha mermado por la alta inflación, el tema de la dolarización de facto y por el mantenimiento de esos cajeros automáticos, que necesitan divisas para cambiarlos o traer las piezas que hacen falta para adecuarlos o hacerles mantenimiento», señaló.

Cajeros sin funcionalidad

Rivas aseguró que los bancos cuentan con recursos para reparar los cajeros. 

«Nada haces con tener el cajero automático en buen estado si no se proporcionan las herramientas, como es el efectivo, para llenarlo de billetes», dijo.

Por eso indicó que, ante la falta de bolívares, los cajeros han perdido funcionalidad.

«El Banco Central de Venezuela reparte los billetes a los bancos, a las bóvedas principales, pero no es suficiente para surtir a todo el país o a todos los bancos», añadió.

Rivas dijo que la reducción de los cajeros automáticos empezó en 2016

En ese momento había casi 10.000 unidades en toda Venezuela, pero año tras año esa cifra ha ido bajando.

Según datos de la Superintendencia de las Instituciones del Sector Bancario (Sudeban) -institución que regula a los bancos venezolanos-, en marzo de 2014 había 9.542 cajeros en el país

En el último informe publicado, en marzo de este año, reportaron la existencia de tan solo 2.275.

Menos agencias bancarias

Rubén Alonso, maestro de 43 años de edad, contó  que cuando necesita bolívares en efectivo trata de no recurrir a un cajero automático

«Ya no tienen razón de ser. No es fácil conseguir un cajero que esté en buen funcionamiento», agregó.

Sus opciones para obtener billetes es hacer transferencias a terceros que tengan efectivo y se lo pasen; pedirle a algún amigo o ir directamente a las oficinas bancarias.

Pero por la crisis económica y la pandemia, los bancos también se han visto en la necesidad de cerrar agencias

El secretario general de Fetrabanca señaló que en 2019 había más de 7.400 sucursales bancarias, pero ahora quedan 3.700

Lo que representa una reducción de 50%.

«No es solo la pandemia. La situación económica ha golpeado a los bancos. Tienen un encaje legal muy alto en estos momentos, aunque el gobierno lo ha bajado de 100% a 85%, todavía sigue siendo alto», señaló Rivas.

Esto hace, de acuerdo con su explicación, que la rentabilidad de los bancos se vea afectada, por lo cual es necesario tomar medidas económicas.

«Primero hay que reactivar la economía; reducir el gasto público; dejar de imprimir billetes inorgánicos, que nos afecta bastante porque eso produce la inflación», sostuvo.

Sobre una posible reconversión monetaria, el secretario de Fetrabanca apuntó que es necesario especialmente en materia contable.

«Ya estamos atiborrados de ceros a la derecha, y eso ha traído graves consecuencias a la hora de hacer un cuadre diario de cualquier oficina bancaria», dijo.

Sin embargo, apuntó que sin los correctivos no servirá de mucho eliminar ceros a la moneda.

«Hay que quitar el encaje legal tan alto que tiene la banca. Esto para que ayude a la reactivación del aparato productivo y preste dinero a los pequeños y medianos comerciantes».

El efectivo sigue siendo necesario

Aunque la pandemia ha hecho que un futuro sin billetes o cajeros esté cada vez más cerca, Claudio Rivas aseguró que en la actualidad siguen siendo necesarios.

«Todos los países tienen una moneda y necesitan el efectivo. Aunque en el futuro a lo mejor vamos a definitivamente quedarnos sin moneda, pero en este instante es necesario y en Venezuela más», sostuvo.

Rivas añadió que en el país gran parte de los jubilados no usan la banca digital porque no tienen computadoras o desconocen cómo utilizarlas

«Entonces en Venezuela más aún se necesita el efectivo, para pagar el transporte, la comida, una serie de aspectos que son necesarios para el jubilado», puntualizó.

Tal es el caso de Gustavo Vásquez, un maestro jubilado de 73 años de edad que ha pasado por seis cajeros automáticos para poder hacer una consulta de su cuenta bancaria.

Vásquez relató que cada vez es más difícil encontrar un cajero automático que además funcione

«Cuando uno más lo necesita o requiere de una consulta bancaria, no se halla. He visitado seis cajeros y ninguno funciona», agregó.

fuente

"EL NACIONAL", Venezuela, 29.07.2021

 


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¡BIENVENIDOS, GRACIAS POR ARRIMARSE!

Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio


Mendoza, 11 de noviembre de 2009.