El Nacional ha sabido resistir todos los embates de esta era chavista, pero otros no han podido sobrevivir.
Es admirable la determinación de los profesionales y empresarios que a pesar de todo siguen informando a los venezolanos.
Es el caso de equipo de Venepress que, como este medio de comunicación, asegura que seguirá con su labor.
Las amenazas se hacen realidad cuando funcionarios de las fuerzas de seguridad del régimen toman por asalto las instalaciones de los medios.
Esta vez le tocó a la agencia de noticias recibir la desagradable visita del Sebin.
Los agentes impidieron que los periodistas entraran a su lugar de trabajo.
Con esta medida violaron sin anestesia la libertad de expresión.
Y no pueden decir que no saben lo que hicieron, porque ya es costumbre este tipo de acciones del régimen.
No importa que los manden otros, el que se preste para obstruir o simplemente echar por tierra el derecho que tienen los venezolanos de estar informados está cometiendo un delito de violación de los derechos humanos.
“Telecaribe y Venepress seguirán transitando la vía de ofrecer información de manera objetiva y veraz a los venezolanos a través de sus canales normales, mientras nos sea permitido”, aseguran los dueños de estos dos medios que fueron objeto del arbitrario procedimiento del Sebin.
No dudamos de que este empeño es cierto.
Pero lo triste de esta historia es que los empresarios dueños de medios tengan que hacer la salvedad de que cumplirán con esta encomiable labor siempre y cuando se lo permitan.
Son demasiadas historias de censura.
Ya por esta época se ha hecho normal contar cuántos medios de comunicación ha cerrado, de manera directa e indirecta, el régimen.
Pero que no se haga costumbre, porque la libertad de expresión e información es uno de los derechos humanos más preciados que hay que defender.
Los venezolanos tienen derecho de poder escoger lo que leen, pero, mucho más importante, de saber lo que pasa con total confianza en la veracidad de lo que sus medios de comunicación les cuentan y de poder decir lo que sienten y padecen.
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