Aumento a las jubilaciones: las 4 claves para entender la medida que vetó Milei

23 de agosto de 2024

El Senado aprobó la Reforma Jubilatoria con solo 8 votos en contra — Captura

El presidente Javier Milei anunció hoy que vetará la reforma jubilatoria aprobada ayer por el Senado y acusó a la oposición de impulsar esta "medida demagógica" para poner en crisis la estabilidad fiscal y "destruir el programa económico del Gobierno".

La situación actual de las prestaciones previsionales, en particular de las mínimas, cómo quedarían con la normativa que fue vetada, cuál es la caída del poder adquisitivo en lo que va de la actual gestión y cuál sería el costo fiscal de la medida rechazada por el Ejecutivo.

Las jubilaciones hoy.

La jubilación mínima en agosto es de $225.454,42, mientras que la máxima es de $1.517.094,80.

A las de menores ingresos se les suma un bono de $70.000, que las lleva a $295.454,42.

En términos reales, como el bono se mantiene fijo desde marzo, este ingreso supone una caída real del 7,17% respecto del haber mínimo de diciembre de 2023.

Cómo quedarían con la nueva Ley.

Además de las subas mensuales por IPC, la recomposición del 8,1% y el bono anual atado a la evolución de los salarios, la Ley vetada por Milei incluía una cláusula que establecía que ningún haber previsional podía ser inferior al valor de la canasta básica total de pobreza para un adulto multiplicado por 1,09.

Como, según publicó el Indec, este valor en julio fue de $291.472, el piso jubilatorio en septiembre debería pasar a $317.704,48, un incremento del 35% frente a los $234.540 que percibirán, sin contar el bono, los jubilados de la mínima el mes que viene.

Caída del poder adquisitivo

Según un informe de principios de mes del Mirador de la Actualidad, del Trabajo y la Economía (MATE), una jubilación mínima en junio de 2024 representa apenas un 53% del poder de compra que tenía la misma prestación el mismo mes de 2015. Si se suma el bono de $70 mil, que se mantiene fijo, esa relación aumenta al 71%.
Otro documento del Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda estimó que entre noviembre de 2023 y junio de 2024, el valor nominal de una jubilación mínima con bono creció 122,5%, 3,1 puntos porcentuales menos que la inflación del mismo período, que fue de 125,6%, y 25,9 puntos porcentuales por debajo del incremento promedio de los medicamentos, estimado en 148,4%.

Jubilación mínima vs inflación y precio de medicamentos

El costo fiscal de la medida

En el tuit de anoche de la Oficina del Presidente en el que se anunció el veto presidencial, el Gobierno aseguró que la medida aprobada por el Congreso supone "un gasto adicional del 1,2% del PBI o, lo que es lo mismo, 25% del PBI en términos dinámicos". Este porcentaje, según el comunicado, compromete el equilibrio fiscal y "fuerza" al Ejecutivo a bloquear el aumento.
Según la Oficina de Presupuesto del Congreso (OPC), sin embargo, el costo fiscal del aumento dispuesto ayer por los senadores es menor. Según el cálculo de esta institución, el impacto fiscal de la nueva ley supondrá una erogación extra equivalente al 0,74% del PBI en caso de que el Gobierno otorgue bonos de $70 mil hasta fin de año y del 0,44% si, a partir de la aplicación de la nueva fórmula, se decidiese descontinuar dichos bonos.
El incremento del gasto público para cubrir este incremento, siempre según la OPC, es similar a lo que el Estado dejará de recaudar este año por la reforma del Impuesto sobre los Bienes Personales. Estos cambios, que benefician a los contribuyentes más ricos, implican una caída en la recaudación de entre el 0,29% y el 0,61% del PBI.

fuente

"CORTA", 23.08.2024

Ver entrada del 16.93.2024

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¡BIENVENIDOS, GRACIAS POR ARRIMARSE!

Me atrevo a interpelar, por sentirlos muy cercanos, por más que las apariencias parecieran indicar lo contrario; insisto en lo de la cercanía, por que estamos en el mismo bote – que hace agua - , tenemos pesares, angustias y problemas comunes, recién después vienen las diferencias.

La idea es dialogar, hablar de nuestras cosas, hay textos que nos proporcionan la información básica – no única-, solo es una propuesta como para empezar. La continuidad depende de Ustedes, un eventual resultado adicional depende de todos.La idea es hablar desde un “nosotros” y sobre “nuestro futuro” desde la buena fe, los problemas exigen soluciones que requieren racionalidad, honestidad intelectual que jamás puede nacer desde la parcialidad, la mezquindad, la especulación.

Encontraran en “HASTA EL PELO MÁS DELGADO ...”, textos y opiniones sobre una temática variada y sin un orden temporal, es así no por desorganizado, sino por intención – a Ustedes corresponde juzgar el resultado -.Como no he vivido en una capsula, ya peino canas, tengo opiniones y simpatías, pero de ninguna manera significa dogmatismo, parcialidad cerrada.Soy radical (neto sin adiciones de letras ninguna), pero no se preocupen no es contagiosos … creo, solo una opción en el universo de las ideas argentinas. Las referencias al radicalismo están debidamente identificadas, depende de Ustedes si deciden “pizpear” o no.

El acá y ahora, el nosotros y el futuro constituyen la responsabilidad de todos.Hace más de cuatro décadas, en mi lejana secundaria, de una pasadita que nos dieron por Lógica, recuerdo el Principio de Identidad, era más o menos así: “Si 'A' no es 'A', no es 'A' ni es nada”, por esos años me pareció una reverenda huevada, hoy lo tomo con mucho más respeto y consideración. Variaciones de los mismo: no existe un ligero embarazo; no se puede ser buena gente los días pares.

Llegando al Bicentenario – y aunque se me tildé de negativo- siento que como pueblo, desde 1810, hemos estado paveando … a vos ¿qué te parece?. En algún momento perdimos el rumbo y ahí andamos “como pan que no se vende. Cuentan que don Ángel Vicente Peñaloza decía: “Como ei de andar, en Chile y di a pie, cuando hay de que no hay cunque, cuando hay cunque no hay deque”.

De tanto mirarnos el, ombligo y su pelusa, tenemos un cerebro paralitico, cubierto de telarañas y en estado de grave inanición. Padecemos una trágica concurrencia de factores que nos impiden advertir – debidamente -, este, nuestro triste presente y lo que es peor aún, nos va dejando sin futuro.

A los malos, los maulas, los sotretas, los villanos, los mala leche, los h'jo puta, los podemos enfrentar pero … ¿qué hacemos con los indiferentes, con los que solo se meten en sus cosas, y no advierten que el nosotros y el futuro por más que sean plurales son cosas personalisimas? Y luego dicen que quieren a sus hijos y su familia; ¡JA!, ¡doble JA!, ¡triple JA! (il lupo fero).

¡¡EL REY ESTÁ EN PELOTAS!!, dijo el niño de la calle, hijo de padre desconocido y madre ausente, ese niño es mi héroe favorito.

¿QUÉ ES PEOR LA IGNORANCIA O LA INDIFERENCIA?

¡¡NO LO SÉ Y NO ME IMPORTA!!

El impertinente, el preguntón es nuestra esperanza, nuestro “Chapulin Colorado”.

Mis querido “Chichipios” - diría don Tato- no olviden que además de ver el vaso medio vació o medio lleno, hay que saber que contiene – sino que le pregunten a Socrates - ¡Bienvenidos! Adelante. Julio

Mendoza, 11 de noviembre de 2009.