EN
BUSCA DE U$S 160 MIL MILLONES
Es
el monto que se “fugó” del país en los últimos 20 años. Con
el blanqueo de divisas tal vez no se recupere ese dinero, aunque se
abre un panorama positivo.
La
primera semana del blanqueo de capitales abrió expectativas
positivas en el gobierno nacional, que espera el ingreso de un piso
de u$s4.000 millones… del circuito ilegal de la economía.
Es
una porción insignificante de los u$s160.000 millones… que, según
estima el propio Gobierno, se fueron del país en los últimos 20
años, pero pueden ayudar a dinamizar una economía anémica por las
inconsistencias y asimetrías que viene mostrando un modelo al borde
del agotamiento.
Según
datos que emergen del sistema financiero, la Argentina es el segundo
país del mundo, después de Estado Unidos, donde los individuos
tienen más dólares.
La
razón no debe buscarse en que los argentinos se volvieron locos o en
que sean una comunidad de antipatrias, sino en los padecimientos y
sacudones que varias generaciones de compatriotas padecieron a lo
largo de las últimas décadas.
Una
de las pocas reservas de valor que tuvieron los argentinos fue el
dólar, en un país que viene sufriendo al menos una crisis severa
por década con devaluaciones recurrentes.
Ahora,
esa reserva de valor está vedada, a menos que se recurra al mercado
ilegal, y el gobierno aspira convencer a los ciudadanos de que esta
vez sí, la moneda nacional es la ideal para horrar.
Será
difícil persuadir a la gente de este argumento si la inflación
sigue brincando al 25% anual, más allá de los esfuerzos por
ocultarlo bajo un manto de estadísticas sospechadas.
Según
la lectura que hace el oficialismo, los millones de dólares que se
fueron de circuito incluyen rentabilidad no declarada, utilidades por
las que no se pagaron impuestos, y que ahora volverán parcialmente
al sistema.
De
paso, espera que esas divisas ayuden a reanimar la actividad
inmobiliaria, un sector arrasado por el cepo cambiario y que todavía
no da muestras de recuperación.
El
Gobierno nacional debió echar mano al blanqueo para resolver en
forma parcial los cuellos de botella que se acumulan, uno cuyos
ejemplos más claro es la necesidad de importar combustibles en forma
incremental.
“A
veces para alcanzar un objetivo hay que tragarse un sapo”,
dijo un diputado kirchnerista citando una frase legendaria del
dictador Alejandro Lanusse cuando pugnaba por impedir el retorno de
Juan Perón a la Argentina en los ’70.
“Si
se anima a volver, me trago un sapo”,
había desafiado Lanusse. El general volvió y el dictador nunca
cumplió su promesa, pero la frase quedó en la historia trágica de
la Argentina.
El
“sapo”
que debió tragarse el gobierno de Cristina Fernández es la
injusticia que conlleva el perdón fiscal a los evasores, en momentos
en que la AFIP realiza un despliegue descomunal para recaudar cuanto
peso anda dando vueltas por ahí.
Pero
a necesidad tiene cara de hereje y el blanqueo, con sus CEDIN a
cuestas, lo demuestra.
La
expectativa es que ese instrumento permita aceitar un circuito
económico cada vez más necesitado de divisas.
Los
cuellos de botellas que el propio gobierno admite que se deben
resolver los encabeza el desbalance energético, ya que cada año el
país necesita importar más energía.
La
oposición tiene una lectura dramática sobre la situación:…
señaló que el gobierno gastará u$s15.000 millones… para importar
combustible y gas… sostuvo que esos dólares el gobierno intentó
conseguirlos con el cepo, pero con esa medida inédita no hizo más
que generar dificultades en la economía…, el Gobierno no está
acertando en ir a combatir la causa, que es la inflación, mientras
que la presidenta le echa la culpa a los formadores de precios.
“No
es el gobierno el que aumenta los precios”,
disparó con acierto Cristina. “Pero
sí el que crea las condiciones para que la inflación se dispare”,
le responden desde la oposición a la cual la realidad parece darle,
en parte, la razón.
Al
menos si se tiene en cuenta que el gobierno debió echar mano a la
ley de Abastecimiento y aplicar insólitas clausuras de supermercados
por algunas horas.
FUENTE
“UNO”,
07.07.2013
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