YPF – ODEBRECHT
2009 - 2013
Caso Odebrecht: detectan graves irregularidades en una obra de YPF

Una auditoría interna advierte sobre el aumento de costos
del contrato con la firma brasileña entre 2009 y 2013, subcontrataciones
sospechosas y un "premio" millonario para la Uocra del Pata Medina Fuente: Archivo
26 de febrero de 2018
Con el
fantasma del Lava Jato sobre sus espaldas, YPF le entregó a la Justicia una
minuciosa auditoría interna y externa sobre la megaobra que la petrolera le
adjudicó a Odebrecht.
El informe expone posibles irregularidades en el contrato
otorgado al gigante brasileño para construir una planta en Ensenada entre 2009
y 2013, cuyo costo fue de US$285 millones, según reconstruyó LA NACION sobre la base de documentos y siete
testimonios.
Las
sospechas se concentran en una subcontratación que benefició a Petersen, la
constructora de la familia Eskenazi, que a su vez conducía YPF en el momento de
la adjudicación.
Además, revela la renegociación del contrato que llevó a más
que duplicar el costo final de la obra, y la entrega de un millonario "premio"
a la regional platense de la Uocra, por entonces liderada por Juan Pablo
"Pata" Medina, hoy preso.
El
período bajo la lupa abarca tanto la gestión de la familia Eskenazi al frente
de YPF, junto con los españoles de Repsol, como la intervención por parte de
Cristina Kirchner y el posterior arribo de Miguel Galuccio.
Con los
resultados preliminares de esa auditoría, la cúpula actual de YPF remitió los
datos a Comodoro Py (donde se instruye una investigación) y radicó una denuncia
por el robo o extravío de documentación interna, que resultó inhallable tras
meses de búsqueda.
La
decisión de YPF de avanzar con la auditoría se gestó a fines de 2016, cuando
trascendió a nivel mundial que Odebrecht reconoció el pago de sobornos en la
Argentina y otra decena de países.
Revelaciones periodísticas posteriores
sacaron a la luz, además, planillas clandestinas de Odebrecht en las que
constan "pagos indebidos" a una persona con el alias Pato, sin
identificar, pero vinculada a la planta de Ensenada.
Consultados
por LA NACION, desde Odebrecht se
defendieron:
"No hubo sobreprecios con YPF". Explicaron que las
variaciones del valor original se debieron a que "con la ingeniería de
detalle, los insumos locales y la mano de obra realmente necesaria, el
presupuesto se elevó".
El informe
de auditoría interna, que el directorio de YPF le encargó a un comité ad hoc conformado por Fabián
"Pepín" Rodríguez Simón (titular de la Comisión de Compliance),
Carlos Felices (presidente del Comité de Auditoría) y Miguel Gutiérrez (el
presidente de YPF), se realizó con la ayuda de auditores externos.
Y expone cuatro
zonas grises:
Subcontratación millonaria
Poco
después de que Sebastián Eskenazi firmó la adjudicación a Odebrecht por US$130
millones, los brasileños subcontrataron a la constructora Petersen, de los
Eskenazi, por $29,6 millones, una operación que podría haber sido triangulada.
Consultados
por LA NACION, voceros de Eskenazi
defendieron esa operación, negaron que fuera un delito o siquiera
"repudiable éticamente", indicaron que la ejecución final se redujo a
$17 millones y remarcaron que el análisis del proyecto debería analizarse
"en su contexto".
"Cuando llegamos a YPF, el contrato ya estaba
preadjudicado por Repsol a Techint, nosotros logramos bajarlo y que a Odebrecht
se le adjudicara solo un tramo por U$130 millones. Cuando nos fuimos, volvieron
a subirlo a casi US$300 millones. ¿Quién actuó bien, entonces?",
desafiaron.
Consultados
por LA NACION, desde Techint
defendieron su proceder. "En diciembre de 2007 participamos en el concurso
privado para esa obra que lanzó YPF bajo gestión de Repsol con una oferta por
295 millones de dólares", indicaron.
De ese monto global, abundaron desde
Techint, "cerca de 150 millones de dólares correspondían a la compra de
equipamiento".
Ese
concurso se cayó a fines de 2008 y, ya con los Eskenazi dentro de YPF, se registró
el segundo intento.
"En abril de 2009 volvimos a participar, pero la
modalidad contractual no incluía los equipamientos", aclararon desde
Techint. Perdieron frente a Odebrecht, que llegó con el valor agregado del
financiamiento del Bndes brasileño.
La expansión del contrato
Según
la auditoría interna, el contrato con Odebrecht se renegoció y amplió en
octubre de 2012 -ya durante la gestión de Galuccio-, cuando a los US$ 130
millones se sumaron otros US$ 96 millones, para dos meses después fijarse una
consolidación final que llevó la cifra a los US$285 millones.
Ambas
readecuaciones, además, fueron suscriptas por un gerente que carecía de
autorización para aprobar con su sola firma esos montos. Pero los auditores no
encontraron ningún aval del directorio.
Según
Galuccio, no obstante, la auditoría es "inexacta" y los Eskenazi
contaron una versión sesgada de los hechos.
"El contrato original no se
firmó por US$130 millones, sino por 290 millones. Ocurre que US$120 millones
fueron a la compra de equipamientos y, de esos, US$95 millones fueron a
Odebrecht", sostuvo ante la consulta de LA
NACION.
"Nuestra gestión fue impecable, los valores originales se
trastocaron por la inflación y por la ineficacia en la construcción? Teníamos
una relación muy complicada con el Pata Medina".
"Premio Uocra"
Según
lo que pudo reconstruir la auditoría interna, ya en la recta final de la obra,
desde YPF se entregó a Odebrecht una partida de US$ 4 millones, que se
identificó como "premio Uocra" y bajo el concepto de "final de
obra".
Pero esa partida carece de documentos respaldatorios que permitan
verificar su destino final.
Galuccio
indicó que ese premio era parte de un convenio colectivo que YPF firmó con la
Uocra hace diez años, que calificó de "superestándar" en todas las
obras grandes.
Documentación faltante o robada
Los
auditores verificaron que faltan papeles. ¿Se perdieron o se los robaron?
En
particular, la documentación respaldatoria que Odebrecht debió presentar para
cobrar certificados de obra por cerca de US$ 70 millones entre agosto de 2012 y
mayo de 2013.
Es
decir, el mismo período durante el cual se renegoció y amplió el monto del
contrato.
Anticorrupción quiere que se
indague a Aníbal
La
Oficina Anticorrupción (OA), cuya titular es Laura Alonso, pedirá hoy la
declaración indagatoria de Aníbal Fernández por presunto desvío de fondos para
construir 23 canchas de hockey que nunca se hicieron.
La
OA, según informó ayer Clarín, pedirá que se indague al exfuncionario
kirchnerista como imputado por haber malgastado presuntamente 56 millones de
pesos del Estado para redireccionarlos a la compra de veintitrés canchas de
césped sintético para jugar hockey.
Se
trata de una operatoria en la que pudo estar implicado en negociaciones
incompatibles con su cargo en la función pública y defraudación al Estado
nacional.
Fuente
“LA NACIÓN”,
26.02.2018
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