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MENDOZA: PAMI/JUBILADOS

ECONOMÍA/TRAGEDIA/CONVENTILLO

• Martes, 13 de junio de 2017

PAMI: cirugía cardiovascular, sólo urgencias

Informaron que la obra social de jubilados está abonando 50% de esas intervenciones.

Tales operaciones se realizan en el hospital Italiano, Clínica de Cuyo y Santa Isabel de Hungría. | Marcelo Ruiz / Los Andes

Priscila Mateos

Debido a que PAMI está abonando cerca del 50% del valor real de una cirugía cardiovascular, los especialistas locales que prestan este tipo de servicios para la obra social de los adultos mayores sólo están operando casos de urgencia.

En efecto, las intervenciones han disminuido a la mitad desde mediados de abril, cuando se pasó de pagar por prestación a abonar per capita. 

Así, de un promedio de 13 intervenciones mensuales se pasó a realizar 6 ó 7.

Son dos los equipos que realizan este tipo de cirugías para PAMI, que a su vez se desempeñan en tres instituciones. 

Uno de ellos es el liderado por Claudio Burgos, que trabaja en el Hospital Italiano, y el otro tiene al frente a Martín Farrando, quien se desempeña en la Clínica de Cuyo y en el Hospital Santa Isabel de Hungría.

“Estamos operando las urgencias mientras esperamos las noticias del gerente del director de la Regional”, precisó el Burgos, respecto a la medida que se han visto obligados a realizar mientras aguardan que desde la administración central de PAMI, resuelvan la situación.

Es que, actualmente, se está pagando unos 80 mil pesos por una intervención que tiene un valor de 200 mil pesos. 

Cabe aclarar que, en ese total, quedan incluidos 7 días de internación, los honorarios de todos los profesionales que intervienen (con excepción del anestesista), los materiales descartables, medicamentos, estudios y transfusiones.

Al respecto, el doctor Farrando reconoció que “llama la atención que (los pagos) estén tan alejados de la realidad” y que por eso están “tratando de reprogramar las cirugías que no son urgentes hasta tanto se resuelva esto”.

Preocupado ante la situación, Burgos remarcó que se trata de intervenciones “con gasto fijo, con muchos insumos americanos (dolarizados)” y que, a pesar del filtro que se han visto obligados a establecer “hay cada vez más casos urgentes”.

Por su parte, el cardiocirujano del Italiano reflexionó: “Hemos venido aguantando lo que hemos podido, pero todo sigue subiendo con la inflación, los medicamentos cuestan cada vez más. La situación se ha agravado en los últimos dos meses y este último mes es prácticamente inviable”.

Un dato a tener en cuenta es que, cuando se establecieron las tarifas en octubre de 2013, los montos eran igualmente escuetos y no dejaban mucho margen a los especialistas.

Pese a ello, ambos cardiocirujanos indicaron que las autoridades de  la obra social de los adultos mayores a nivel local han realizado gestiones para que se reúnan con los referentes nacionales con el fin de mejorar en las cifras en cuestión. 

Así, Carlos Valcarcel, titular de PAMI delegación Mendoza, confirmó que “efectivamente” sólo están operando urgencias, aunque aclaró que “en este momento es un tema que se está conversando y es probable que pronto se llegue a un acuerdo en cuanto a los valores que reclaman los cirujanos cardiovasculares”.

Por su parte, el doctor Burgos indicó que, hasta tanto no se logre una mejora, la decisión de la obra social de jubilados y pensionados “pone a los prestadores en una situación crítica” porque “no pueden los efectores de alta complejidad financiar la salud de PAMI”.

En cuando a la posibilidad solicitarle a los propios pacientes que abonen, por ejemplo, el material descartable para reducir los costos del equipo médico, Farrando aclaró que “nunca se les ha cobrado nada porque no nos parece ético hacerlo”, agregando, además, que “tampoco hay forma de hacerlo”.

 

Aclaración sobre problemas con prestadores

Luego que los propietarios  del Hospital de Ojos Caimarí aseguraran que la decisión de Pami de no renovar contrato con ellos como prestadores responde a una represalia por ser familiares de María Laura García (quien en enero de este año denunció al ahora ex ministro de Salud Rubén Giacchi por violencia de género), desde PAMI, salieron a desmentir que la decisión respondiera a eso.

Sobre este punto, Valcarcel  explicó que “desde agosto del año pasado todos los prestadores venían siendo monitoreados” por la administración central y que, en el caso de Caimarí notaron “un incremento desproporcionado de prácticas y prestaciones en proporción a la cantidad de afiliados que tenían asignados”. 

Luego de que en febrero se realizara una auditoría sobre la institución “desde Buenos Aires nos pidieron que enviáramos 12 ó 14 historias clínicas de pacientes cuyos nombres nos pasaron”.

Cuando PAMI cambió el modelo retributivo, Valcarcel aclaró que, al consultar si enviaba alguna carta documento para informar que el Hospital de Ojos dejaba de ser prestador, “me dicen que no, que no firme nuevo convenio con ellos”. 

Tampoco lo hizo con el Hospital Santa Isabel de Hungría (por decisión del nosocomio) ni con la Sociedad Española de Socorros Mutuos (por considerar que no cumplía con los parámetros físicos e institucionales exigidos por la obra social).

El titular del PAMI local aseguró que “de ninguna manera hay animosidad contra las personas que conforman Caimarí” y que la decisión no está relacionada con “los dolorosos hechos relacionados con Giacchi”.

Respecto a la muerte de una mujer de 54 años ocurrida el fin de semana en la Sociedad Española cuyos familiares aseguraron no fue aceptada días antes en el Hospital Santa Isabel de Hungría debido a que ya no eran prestadores para la obra social en cuestión, Valcarcel explicó que “los tres  hospitales tienen una obligación contractual hasta el 30 de junio de seguir atendiendo pese a la cesación establecida”. 

fuente
"LOS ANDES", 13.06.2017