MENDOZA: LA TUPAC
ALLANAMIENTO Y LETRADO IRACUNDO
- Sábado, 15 de abril de 2017
Allanaron un depósito de la Túpac y un hijo complicó a Nélida Rojas
La fiscal Chaves halló cheques en blanco y firmados por presidentes de cooperativas en poder del imputado.
Damián Torrengo, hijo de Nélida Rojas, mira sentado en el piso cómo la policía revisa su auto. | Marcelo Ruiz / Los Andes
La fiscal de la causa de la Túpac Amaru en Mendoza, Gabriela Chaves, salió a buscar pruebas y las consiguió, aunque no del modo que esperaba.
La magistrada hizo ayer uno de los 24 allanamientos postergados a causa de las “filtraciones” que ella denunció.
Fue en un galpón de la ruta 34, camino a Lavalle.
Allí pudo constatar la existencia de máquinas viales, camiones y materiales de construcción usados en los barrios de las cooperativas que integran la organización kirchnerista que lidera la hoy detenida, Nélida Rojas.
Pero allí la fiscal no pudo encontrar “documentación” que le permitiera probar una de las calificaciones por las que Rojas, su hermano Ángel, su marido Ramón Martínez, y dos de sus hijas están detenidos: la asociación ilícita (las otras imputaciones son estafa presunta, extorsión usurpación y coacción agravada por compeler a hacer abandono de domicilio).
Sin embargo la suerte jugó a su favor y la llegada de otro de los hijos de Rojas, le permitió encontrar documentos, cheques en blanco y hasta dinero en efectivo.
Fue gracias a que la jueza de Garantías, Alejandra Mauricio, que esta vez accedió a autorizar el allanamiento; que Chaves llegó al galpón temprano en la tarde del Viernes Santo.
La idea era llegar de sorpresa, por eso eligió el feriado.
Ella no lo confirmó pero se comentaba que ni el grupo de policías que la acompañó sabía adónde iba.
Se enteraron cuando estaban en camino.
El galpón tiene unos 5 mil metros cuadrados cubiertos. En otras épocas fue un local bailable (El Pelícano). Hay quien dice que antaño allí hasta funcionó un sitio de citas.
Ahora es un espacio que la Túpac alquila para guardar equipamiento de construcción. No se veía muy lleno. Apenas algunos materiales, dos camiones y un acoplado, una topadora y una retroexcavadora.
En el lugar sólo había un sereno, a quien Chaves interrogó luego de entrar.
En ese momento fue que la suerte empezó su juego.
La primera en arribar al lugar fue una de las hijas de Rojas, Natalia Martínez. Su presencia se debió a los movimientos que vio en el galpón.
De inmediato fue indagada e incluso hasta le revisaron el auto en el que viajaba, el cual le fue retenido “por no contar con el seguro obligatorio”, explicaron los policías.
Quiso el destino que pasara por el lugar otro hijo de Nélida, Damián Torrengo, quien también está imputado en la causa y que, al ver a Natalia con los policías, se detuvo.
El joven, presidente de la cooperativa textil -también integrada a la Túpac- fue registrado en el sitio.
Lo primero que se supo fue que el auto que manejaba, un Citroën Aircross, no era suyo sino de Hugo Martínez, otro familiar de Rojas. La tarjeta azul que había, estaba a nombre de Natalia. Eso provocó que también se le retuviera el vehículo.
Chaves procedió a registrar el coche y fue allí que, entre otras pertenencias, encontró una mochila con documentos que podrían ser útiles “para la hipótesis de asociación ilícita”. Por eso secuestró el auto.
Entre lo encontrado había dinero en efectivo (al menos 10 mil pesos en billetes de 500) y dólares.
También había tarjetas verdes de dos vehículos marca Toyota, una camioneta Hilux y un Corolla. Torrengo dijo que esos vehículos “ya habían sido vendidos”, generando más dudas, ya que al hacer la transferencia no se puede retener la tarjeta verde.
Además, los ayudantes de la fiscal encontraron cheques en blanco, se dijo que firmados “por presidentes de las cooperativas”.
También hallaron una transferencia de un auto, realizada el pasado 17 de marzo, aunque no trascendió marca ni modelo.
Casi al momento de efectuarse el secuestro del vehículo, llegó al lugar el abogado defensor de Rojas y Martínez, Alfredo Guevara.
Notablemente ofuscado, el letrado pidió ingresar al lugar del allanamiento pero Chaves se lo negó, lo que generó una airada reacción del abogado.
Chaves se mostró satisfecha con el resultado de la tarea y, si bien no dio detalles, aseguró que seguirá en la búsqueda de pruebas, probablemente con nuevos allanamientos.
Guevara: “Te voy a hacer echar del Poder Judicial”
El encuentro entre el defensor Alfredo Guevara y la fiscal Chaves, no fue para nada amistoso ayer a la tarde, a un costado de la ruta 34, en Lavalle.
El abogado acudió al lugar acompañado por otro de los hijos de Nélida Rojas, Aldo Martínez.
A su arribo, la fiscal Chaves le preguntó por qué había ido. Él respondió que lo hizo porque le habían dicho “que Damián Torrengo había sido detenido”.
En realidad hay quien cree que fue el propio Torrengo el que dio aviso para que el letrado asistiera al galpón, aunque, según pudieron comprobar los cronistas instalados en el lugar, en ningún momento se emitió una orden de detención contra el joven.
Guevara, además, quiso ingresar al galpón porque se le estaba tomando declaración al sereno. “La defensa debería estar ahí porque se podrían aportar datos para la causa”, consideró. “Hacen testimoniales a escondidas de la defensa”, continuó.
Pero cuando Chaves le impidió el acceso al lugar, el letrado estalló y arremetió contra la fiscal: “Yo ya te he denunciado por criminalizar a esta gente. Te voy a hacer echar del Poder Judicial”.
“Represora, fascista”, siguió diciendo a la fiscal, al tiempo que vociferaba a los periodistas que se estaba produciendo el “regreso a los tiempos de la dictadura militar”.
fuente
"LOS ANDES", 15.04.2017
No hay comentarios:
Publicar un comentario