UNOS HAN DE MANDAR ...

ANTE CIRCUNSTANCIAS IGUALES, HACE MUCHO, YA SE DIJO



“... UNOS HAN DE MANDAR SIN CONTROL Y OTROS HAN DE OBECECER SIN EXAMEN”

Carlos Damico, “Buenos Aires, sus hombres, su política, … 1890”



ES MUY PELIGROSO PONER LA SUERTE DEL PAÍS EN LA VOLUNTAD DE UN HOMBRE SÓLO



… alarmante a la sociedad, que favorece el despotismo igualmente que la anarquía …
… por que no haciendo partícipes a los ciudadanos de la confección de las leyes … La revolución tuvo por objeto reducir el poder y dar garantías a la sociedad: garantías para la autoridad que debía presidirnos, garantías para la sociedad a quien debía presidir.
…

… la reunión de esos tres poderes en uno sólo es lo que constituye el despotismo …, por la insuficiencia de las leyes que conceden al gobierno las facultades ordinarias ordinarias, para poder mantener el orden público …
…

… El pueblo que sufraga, ya por los impuestos, ya para las contribuciones para sostener las cargas públicas, tiene también el derecho para que los órganos de su voluntad, que son sus representantes, examinen la inversión que se da a esos mismos fondos con que contribuyen. Esa es una garantía muy primordial en el sistema representativo, pues el ciudadano nunca se podrá tranquilizar al exigirle un impuesto, si él no está satisfecho que va ser investido en beneficio de la comunidad. La misma administración pública debe ser celosa del cumplimiento de esta ley, porque nadie mejor que ella conoce hasta donde puede llegar la crítica respecto del manejo de la hacienda pública … es necesario que las leyes sean practicables y que sean la brújula que conduzca a la autoridad y a los ciudadanos que la han de obedecer …
…

… digo que es muy peligroso poner la suerte del país en la voluntad de un hombre sólo … y desde el momento que se acostumbre esa sociedad a vivir en un orden tan precario de codas, ha de sobrevenir la anarquía, porque desde el momento que se mude de voluntad o deje de existir la autoridad, ¿quién la va a reemplazar?
Nacen otra vez las aspiraciones, todos han de querer mandar, de suerte que habremos venido a parar a un estado mucho peor del que salimos …

Ignacio Martínez, 29.10.1832

“Grandes discursos de la Historia Argentina”, Selección y prologo de Luciano De Privitello y Luis Alberto Romero.
Aguilar, Altea, Taurus, Alfaguara … ,2000, Buenos Aires

Volviendo a Damico: “UNOS HAN DE MANDAR SIN CONTROL Y OTRAS HAN DE OBEDECER SIN EXAMEN ...”

Cito de memoria, en al “Cantar del Mio Cid” dice aproximadamente: ¡QUE LASTIMA QUE TAN BUEN SIERVO, TENGA TAN MAL SEÑOR!


Julio Irrazabal
LE. 8152370